Escribir una crítica es en muchas ocasiones parte de una terapia de expulsión de demonios, es casi casi un exorcismo cuando Satán se te mete dentro nada más ver una película (sí, señores, sé que ahora mismo todos os estáis acordando de al menos tres películas que habéis visto recientemente en la que os costó sacaros a Satán de dentro, de lo "güena" que había sido la propuesta...). En otras ocasiones, escribir una crítica es un acto de contención. En otras, y siempre dependiendo del autor (y ya sabéis que este no es mi caso), es una acto de riguroso periodismo, en otras es una explosión de sensitividad...Como imaginaréis, maneras de escribir hay muchas, formas de afrontar una crítica, un millón de veces más, pero he de reconocer que la forma de enfrentarme a la crítica de hoy, "The Collection", para mi es totalmente inusual, y de corazón espero y deseo que sea la primera y la última que escriba en estas circunstancias. El motivo es que escribo desde la cama de un hospital, cansada de ver día tras día las mismas paredes, cansada de sufrir una rutina sanitaria espartana, cansada de que mi cuerpo me la juegue en cuanto bajo la guardia, cansada de las constantes quejas de mi anciana compañera de habitación, cansada de que me pinchen sin piedad casi todos los días y me dejen los brazos, muñecas y manos moradas...y en medio de este cansancio, de repente, en una de las numerosas llamadas de nuestro implacable y a la vez amado jefe, El Rector, la voz al otra lado del teléfono me dijo seria "Missterror, levanta el culo de esa cama, cambia el ánimo y ponte a escribir la crítica que tienes pendiente YA" y Tachán!!! se hizo la luz, de repente recordé que la última película que había visto antes de ingresar en el hospital había sido "The Collection", y pensé que ahora mejor que nunca podría dar mi opinión, porque el dolor camina conmigo y me sería mas fácil volver a caminar sobre esas pisadas (no os preocupéis, no es para tanto, pero es que me gusta mucho ser una drama queen...).
¿Y por qué os cuento todo esto si en realidad a poca gente le importará? Pues supongo que lo hago para justificarme de alguna manera, porque esta crítica es totalmente de memoria, ya que hace mas de 20 días que la vi. A ver si la edad no se nota...( por cierto, pronto es mi cumpleaños ;) )
Ahora sí, CRITICA:
Hace ya casi 4 añitos, los guionistas de algunas partes de la saga "Saw", Marcus Dunstan y Patrick Melton, aprovechando el tirón de la franquicia, se decidieron a rodar "The Collector", que no pretendía ser otra cosa que un film que se apuntara al carro del torture-porn tramposos que Jigsaw puso tan de moda y que tanto adeptos consiguió.
Pues bien, todos los que vimos aquella propuesta de los guionistas de...(que miren ustedes que esto da un miedito increíble cada vez que es lo mas destacado en la publicidad...), nos quedamos gratamente sorprendidos por lo que nos ofrecían estos dos guio-directores, pues pese a que la fórmula era calcada a lo ya visto: psicópata- pruebas- trampas- cazador y víctima, la propuesta no podía tener un ritmo mas frenético, lo que la hacía tremendamente fresca y ágil, la tensión apretaba fuerte, las torturas eran salvajes, el sadismo de un nivel mucho mas que aceptable en lo que se espera de un torture-porn, porque , esto amigos, estamos todos de acuerdo en que fue un torture-porn, y de los que entretenían mucho.
Todo correcto hasta ahora, ¿verdad?, ¿Cual era la pega entonces de "The Collector"? Pues fundamentalmente que la historia era inexistente, que todo quedaba en el aire, que se abrían demasiadas incógnitas que no se llegaban a despejar, porque se dejaba caer a plomo que todo aquello iba a ser resuelto en la segunda parte (que era un hecho desde que vimos el The End de "The Collector").
Con estos precedentes, "The Collection" (la segunda parte, hell yeahhhhh), se hacía muy esperada, aquí, como digo, supuestamente íbamos a resolver el misterio y las inquietudes del coleccionista, creíamos que todo cobraría sentido, que por fin, aparte de ver trampas elaboradísimas que daban pistas mínimas sobre la relación víctima- verdugo, gato-ratón, íbamos a entender esa relación con una historia atormentada de un perverso y cruel ser, que trata a aquellos que caen en sus manos, como simples plagas de las que hay que deshacerse.
Comienza "The Collection" y me relamo. Esta vez la banda sonora no corre a cargo de Jerome Dillon, sino que lo hace a cargo de Charlie Clouser, ohhhh Diosss, este hombre sabe lo que se hace (todos los NIN lo saben, nenas...). Empiezan las primeras escenas y, queridos amigos y amadas amigas, en quince minutos mi grado de excitación era tal que si hubiera seguido mordiéndome más el labio (mas o menos como hace la señorita Steele a lo largo de toda la abominable, horrible y desastrosa novela "Cincuenta sombras de Grey", que toda mujer con un poco de sentido común debería evitar), me hubiera cercenado la parte inferir del mismo. Como os digo, estos primeros quince minutos son de los mas brutales que he visto en mucho tiempo, una orgía de sangre y muerte, así, sin avisar, de aquellas que hacen época y que hacen que te salgan chispitas en los ojos como cuando estás enamorado y ves a la persona receptora de todo ese amor.
El coleccionista comienza destrozando a todo ser viviente que ha sido invitado a una fiesta muy cool (muy rollo "Blade" pero sin vampiros), y el grafismo es asombroso. Solo por esa entrada, creedme, ya vale la pena ver toda la película. Luego A, B, C, se repite la misma fórmula que encontramos en la primera parte, personajes bastante planos, que aquí también repiten (Arkin que vino al mundo a sufrir...), e introducción de una especie de escuadrón militar bastante ridículo, que sabes desde el minuto uno que no hará otra cosa que el ridículo con sus erróneas decisiones.
Los elementos están donde tienen que estar, todo listo para ser armado, pero el problema OTRA VEZ es que no hay un guión que desarrollar, en "The Collection" vuelve a primar la forma al fondo, y eso ya lo habíamos visto, por tanto el fallo en esta "The Collection" se hace aún mas palpable que en la propuesta originaria.
Una vez asumido que no va a ser lo que esperábamos, y que Dunstan y Melton son hábiles creando expectativas y muy torpes cumpliendo con lo que se espera de ellas, solo nos queda disfrutar de lo que hemos venido a ver: el tan denostado Torture-porn, que cada día va perdiendo mas fuelle. A mi me gusta, lo digo sin tapujos, sin intentar justificarme, así que tengo que decir que yo disfruté de lo lindo con "The Collection", que si bien soy consciente de que está muy por debajo que lo que se ofreció con "The Collector", y aún entendiendo que no es una buena película, que la "historia" no se sostiene por ningún lado, porque ni siquiera hay historia (algo que tampoco debería llevarla al limbo de las "películas del montón", pues en la primera parte, insisto en que ocurría exactamente lo mismo) ¿Qué le puede hacer interesante? Sin duda la truculencia de las trampas, el grafismo, la efectividad en las muertes, el carisma del asesino, los decorados, los efectos, y SÍ, todo esto lo tiene. Porque si hablo de su intento de innovar con una especie de víctimas zombificadas, ya se pierde todo el poco sentido que en algún momento pareció haber en la película. Prefiero no recordar esta insensatez, porque ni tiene sentido, ni provoca ninguna sensación, ni impresiona, solo avergüenza, pero shhhhhhhhh, haced como que no he dicho nada...
"The Collection" es la continuación en toda regla de "The Collector", y lo digo con conocimiento de causa, porque no hace otra cosa que continuar lo iniciado en la primera parte paso a paso. Todo se repite, los aciertos y las carencias, así que sería hipócrita por mi parte decir que no me ha gustado , cuando la primera me gustó y mucho, pero claro que sí, tengo que reconocer que no está a la altura de lo esperado, ni mucho menos, porque aquí se necesitaba una explicación, un buen guión, una buena resolución, no un buen negocio, que es lo que se está gestando, ya que insisto en que la sombra de "Saw" es alargada, y las sombras de los dólares aún lo son más, y visto el negocio, el arte se queda relegado a un segundo plano, con lo cual, y mirad que yo soy mala pitonisa...me atrevo a vaticinar que esto va a ser acción- acción, sangre-sangre sin control y una historia mas simple que los dibujos animados para los niños de dos años en tooodas las partes que aún nos quedan por ver, eso sí, intentado un trasfondo enrevesado que no hace sino mas ridícula la idea de una resolución decente que desde ya, sabemos que nunca llegará.
En definitiva, mas de lo mismo, pero de eso mismo que nos gusta. Película para ver y seguramente olvidar, pero que se disfruta como se debe disfrutar en su cortita duración.
Ahora la elección es vuestra. Una vez vista es CUando decidiréis si esto merece o no la pena, lo sé, lo sé...es que me gusta poner las cosas fáciles...