Si, tengo que reconocerlo, he disfrutado mucho con esta película. Si, es cierto, ‘The funhouse massacre’ es una cinta excesivamente irregular, donde ciertas partes tirando a cómicas no acaban de cuajar y donde esa especie de suicide squad en plan asesinos en serie de barraca de feria situada en un pueblo de la América profunda no es aprovechada como sería necesario y como al espectador le gustaría, haciendo que la presencia de alguno de estos criminales quede poco menos como una simple anécdota sin fuerza, lo que nos lleva a pensar que igual hubiera sido bueno que alguno de ellos se hubiera quedado en la sala de montaje. Todo esto sumado a que a la película le hubiera venido bastante bien un poco mas de gore, de mala leche y de humor negro, hacen que ‘The funhouse massacre’ sea una simpática película a la que el espectador, probablemente, pueda perdonarle los muchos fallos que tiene. La falta de pretensiones de la cinta dirigida por Andy Palmer y escrita por Ben Begley consigue que si los espectadores se acercan a ella sin prejuicios y con ganas de pasar hora y media entretenidos, es muy probable que lo hagan.
‘The Funhouse masssacre’ es carne de maratón nocturno de Sitges. Y esto, que ya lo dije con ‘Stung’ de Benni Diez lo digo con el máximo respeto, ya que han sido muchas las cintas que he visto en sesiones nocturnas de dicho festival que me han entretenido y mucho (Allí fue donde descubrí ‘The Collector’ de Marcus Dunstan, mi querida ‘Lesbian vampire Killers’ de Phil Claydon, la infravalorada ‘Shadow’ de Federico Zampaglione, esa frikada titulada ‘Norwegian ninja’ de Thomas Cappelen Malling, la brutalmente divertida ‘Sudor Frío’ de Adrián García Bogliano o las soberbias ‘Rabies’ de Aharon Keshales y Navot Papushado y ‘Rubber’ de Quentin Dupieux) ya que este es el hábitat natural para una cinta como esta: Verla rodeada de gente que tenga ganas de echarse unas risas y pasarlo bien viendo un poco de sangre. En un ambiente festivo es donde mejor se puede disfrutar de una película como esta, ya que es posible que si la vas a ver solo en casa igual te cueste mas conectar con la propuesta de Palmer o directamente te parezca una basura.
Cinco de los criminales más peligrosos de la historia reciente se encuentran encerrados en una institución mental de la que todo el mundo niega su existencia. Una periodista concertará una cita antes de, cómo no podía ser menos, Halloween, con el Doctor Warden (Robert Englund) para escribir un artículo y dar a conocer al mundo quién se encuentra detrás de esos muros. Pero algo pasará y estos, en lo que parece un elaborado y extraño plan, irán a la casa del terror de una feria rural para seguir con sus aficiones: Matar a gente de muy diversas maneras. El típico grupo de amigos que suele formar parte de este tipo de películas decidirán acercarse a la feria y disfrutar de la casa del terror… y bueno…ya de paso disfrutar de todo aquello que suelen hacer en este tipo de películas.,. ya me entendéis.. Otras cosa no, pero original, lo que se dice original el guión,.. poco…
Llegados a este punto es inevitable no pensar en dos películas. Una de ellas es el clásico de Tobe Hooper ‘La casa de los horrores’ (‘The Funhouse’) ya que ambas comparten la idea de situar a uno (O varios) asesino(s) en una atracción de feria a la que acudirán los incautos protagonistas (La inocencia inicial de la que hace gala el personaje interpretado por Renee Dorian en la cinta de Palmer nada tiene que envidiar a la del personaje de Elizabeth Berridge en la de Hooper). Si bien es cierto que vista a día de hoy la cinta dirigida por Tobe Hooper resulta demasiado inocente, esta dejaba de lado el humor para centrarse en el terror algo que no parece hacer la película dirigida por Palmer. Y es por esto que la otra de las cintas que me vinieron a la cabeza al ver esta película no fue otra que ‘Freaked’ de Tom Stern y Alex Winter porque cierto uso del humor y algunos gags me parecía que hermanaban a ambas películas (Personalmente me quedo con la cinta de Palmer. ‘Freaked’ me decepcionó la primera vez que la vi y a día de hoy sigo sin cogerle el punto. La veo, no me aburre pero tampoco me llega).
Pero hay otras cintas que al espectador le pueden venir a la cabeza la ver ‘The Funhouse massacre’. Ese torpe policía medio lelo parece un hermano bastardo de Dewey (David Arquette en ‘Scream’) y esa policía encargada de investigar los casos interpretada por Scottie Thompson muy probablemente nos traerá a la memoria al personaje que dio vía Jamie King en ‘Silent night’. Hay que añadir que en esta mezcla de terror y comedia que hace Palmer en su película también hay ciertos rastros de drama, algo que rompe completamente. La idea de Begley de involucrar personalmente a algunos de los personajes en la historia, no solo resulta forzada si no tópica y absolutamente increíble. Ese detalle que observaran los espectadores, también se podía haber quedado en la mesa de montaje y nadie lo echaría de menos.
A nivel interpretación no hay mucho que decir. Sigo pensando que si se hiciera un remake español de esta película habría que cambiar a Matt Angel (Morgan) por Julián López, y aunque el trabajo de Angel es de lo mejor de la cinta, López conseguiría probablemente sacar mas chispa a su personaje (Lo mismo me pasó al ver a Henrik en ‘Liza the fox-fairy’ y el personaje interpretado por Raúl Cimas en ‘Museo Coconut’). Obviamente una cinta como esta tira mucho de la sobreactuación y el exceso, algo que en algunos casos puede ir muy bien pero en otros no tanto, haciendo que el espectador pueda tener la sensación de que en algún momento todo resulta demasiado forzado para arrancarle una sonrisa, lo que deriva en que la película pierda frescura. El chiste repetido y alargado deja de ser un chiste.
‘The funhouse massacre’ posee un gran trailer que consigue captar interés del espectador y le deja muy claro a este ante que película se encuentra: Ante una cinta que probamente tenga más de humor que de terror, ante una cinta pequeñita pero bien pensada cuyo único fin de divertir al espectador. Pero a la vez, el trailer promete tanto que habrá personas que se sientan decepcionadas con lo que Palmer acaba ofreciendo. ‘The Funhouse massacre’ es una película para ver dejando los perjuicios de lado, es una película que hay que estar dispuesto a ver con ganas de divertirse y pasar un buen rato. La cinta de Palmer no pasará a la historia del cine pero si que es una de esas películas que consiguen ganarse nuestra simpatía y que la recordemos con cariño. Y al fin y al cabo creo que eso era lo que buscaban tanto Palmer como Begley y lo han conseguido.
Lo mejor: La presentación de los asesinos. La falta de pretensiones de la película.
Lo peor: La historia no deja de ser muy leve y los toques de humor no siempre están bien conseguidos.